Postura de viudas de policías caídos en la emboscada de Aguililla

“Nuestros esposos entregaron todo por servir a su país, no se admite, no se acepta que estos hechos queden impunes”

@Karla Ayala

¿Quién llora por ellos?

Han transcurrido dos años del lamentable suceso en el que fueron emboscados elementos de la Policía Estatal de Michoacán, resultando trece de ellos fallecidos y nueve más lesionados; todos ellos con familias: esposas, hijos/as, padres, madres y ahora forman parte de las víctimas de ese lamentable suceso, sin omitir que a la fecha no han recibido justicia por el daño a sus familiares.

La Fiscalía General de Justicia del Estado, no ha cumplido las ordenes de aprehensión contra los responsables de ese hecho, donde perdieron la vida nuestros esposos, y otros más están aún con daños irreparables. Pareciera que desearan condenar al olvido, o impunidad ese terrible hecho que destruyó a nuestras familias, y parece no sea relevante para la sociedad.

¿Porqué?

¿Será que la principal causa para no atender el dolor de las victimas es que su labor policial de servir y proteger arriesgando sus vidas no era prescindible o suficiente para la sociedad o el estado? ¿En qué momento decidieron echar al olvido a las víctimas de esos Policías caídos en cumplimientos el deber, que merecen por tan honrosa función un proceso apegado a la legalidad? A la justicia.

Las agresiones a policías tan sólo son una parte del reflejo de la actuación y desempeño del Estado, que no han cumplido su función de garantizar la Seguridad para quienes nos protegen; simplemente hablemos de las condiciones en las que deben realizar sus funciones como: falta de equipamiento y capacitación adecuada, y que a pesar de ello realizan su función diariamente a pesar de estas carencias, se les olvidas que esos hombres y mujeres, son padres, madres, esposos, esposas, hijos.

¿Quién llora por ellos? ¿Quién hace justicia por el policía? ¿A caso tienen más derechos los delincuentes?

Exhortamos a las autoridades competentes para dar el puntual seguimiento y sobre todo se haga justicia a nuestros esposos y a sus compañeros lesionados.

Exhortamos a la Secretaría de Seguridad Pública, a dotar a los elementos del equipo necesario para sus funciones, nunca más un policía muerto por falta de equipo y capacitación.

Hacemos un llamado a la autoridad para poner atención y garantizar los derechos de aquellos a quienes todo mundo desprecia, de quienes día con día dan la vida por servir a su país, de ese el “policía”.