El sueño olímpico para la Selección Mexicana de Gimnasia Rítmica se convirtió en realidad
Tras estar atrapadas en medio de la guerra de Israel, ahora saborean el subcampeonato
@Dulce Mar
La selección mexicana de gimnasia rítmica ha vivido un año de montaña rusa. Arrasó con medallas en los pasados Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023. Hace un mes se encontraba atrapada en Israel en medio de la guerra y hoy saborean el subcampeonato panamericano y el boleto a los Juegos Olímpicos de París 2024.
Para Adirem Tejeda, Kimberly Salazar, Julia Gutiérrez, Ana Sofía Flores y Dalia Alcocer el sueño olímpico se convirtió en una realidad. Comenzó con una gran expectativa que comenzó a tomar forma en los Centroamericanos, se tornó una pesadilla al verse inmersas en una guerra en un país que eligieron para prepararse, dejó serias dudas por el impacto psicológico que vivieron antes de ser rescatadas en un avión de la Fuera Aérea de México, pero hoy es felicidad total.
Después de la exhibición dada en el mes de julio en el Polideportivo de Ciudad Merliot, en el central departamento de La Libertad en San Salvador, donde se quedaron con todas las medallas de oro, la Selección Mexicana de Gimnasia Rítmica decidió realizar un campamento de trabajo en Israel, debido a que su propia entrenadora Blajaith Rojas lo solicitó, ya que al ser el representativo israelí el actual campeón olímpico de gimnasia rítmica, precisaban de su asesoría y de pulir algunos detalles rumbo a Santiago 2023.
Se vino el conflicto bélico, cuatro días de angustia, otro más de vuelo en un avión de la Fuerza Aérea para llegar a México e iniciar una concentración en el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR) de la CONADE para trabajar, más que el aspecto físico, la situación mental por el trance vivido en Israel.
En plena competencia de los Juegos Panamericanos Santiago 2023 la angustia volvió a salir a flote y se respiró hasta último momento en la competencia del all-around en conjuntos. Es que lo que en la jornada inicial pareció el camino seguro para México hacia la medalla de plata tras la prueba de los cinco aros, terminó convirtiéndose en preocupación y dudas, tras finalizar la prueba de las tres cintas y las dos pelotas.
El quinteto mexicano se había lucido con una prueba prácticamente perfecta. Tal fue así que el jurado les brindó una puntuación de 34.150, lo que las dejó a 1.250 puntos de Brasil, la gran potencia del certamen, y a 2.650 de Estados Unidos, su inmediato perseguidor. Esos más de dos puntos permitían creer que sólo una catástrofe le impediría a las mexicanas llevarse la plata. Sin embargo, en la rutina de los balones y cintas, hubo al menos dos caídas de pelotas y algunos desajustes en los pases de las cintas. Las caras de preocupación de las gimnastas mexicanas lo decían todo: había temor a perder el segundo lugar del podio y alejarse de París 2024.
México recibió 27.600 puntos, casi dos puntos menos que los 29.050 de Brasil. Debía esperar a que Estados Unidos, en el último turno, no superara los 30.250. Y para tranquilidad de las mexicanas, sus vecinas norteamericanas recibieron un puntaje de 26.800 y tuvieron que conformarse con la medalla de bronce.
Así, Adirem Tejeda, Kimberly Salazar, Julia Gutiérrez, Ana Sofía Flores y Dalia Alcocer, obtuvieron el segundo lugar general con una puntuación de 61.750, por debajo de Brasil, que se coronó con una sumatoria de 64.450, lo que les significó sellar su boleto a Juegos Olímpicos y, con ese logro, nuestro país tendrá, por primera vez, presencia en conjunto de gimnasia rítmica, dentro de la magna justa.
En la situación individual, Marina Malpica, quien había ganado cinco medallas de oro en San Salvador, en la prueba de balón individual terminó en cuarto lugar con 31.250 y en aro individual, quinta con 29.500, mientras que Ledia Juárez fue séptima con 28.100