¿QUÉ ES SER UNA MUJER EN MOVIMIENTO?
Eva Contreras
Especialista en motricidad humana, yoga, pilates y actividades acuáticas.
Wellness coach
Podemos apreciar que durante los últimos 20 años hemos recibido una avalancha impredecible de una gran variedad de programas, propuestas y mil y un ofertas sobre actividad física, ejercicio y entrenamiento físico con fines estéticos, de salud, de socialización y de bienestar psicológico y emocional; dirigidas principalmente al mercado más ávido y consumidor según apuntan los datos de la mercadotecnia: LAS MUJERES. Es un hecho que somos precisamente las mujeres quienes consumimos de todo y los servicios de este tipo no son la excepción. A lo largo de 30 años en este campo hemos podido comprobar que muchas veces las mujeres se sienten saturadas, confusas y hasta acosadas ante tal bombardeo. Con sus propias palabras cito: -” hay tantas opciones, que no se cual escoger!”, o bien, – “Quiero empezar a cuidar de mi cuerpo y salud, pero no sé por dónde empezar o cómo hacerlo”, otras más se confiesan a sí mismas carentes de motivación para romper la inercia y/o para ser consistentes. Muchas más expresan: -” he intentado clases de casi todo y nada me gusta o nada me funciona”.
Entonces, ¿cómo una mujer sedentaria puede romper la inercia de la inmovilidad, la rutina sobre aplastante de las obligaciones impuestas por los diversos roles que socialmente debe cumplir (madre, esposa, hija, hermana, amiga, trabajadora, cuidadora, acompañante, etc.)?
Para empezar, debemos preguntarnos algunas preguntas muy personales:
- ¿Cómo me siento físicamente?, es decir, cual es el estado; mi movilidad, salud y vida cotidiana son satisfactorios en mis necesidades físicas más básicas, tales como alimentación, calidad de sueño y descanso, niveles de energía y actividad.
- ¿Cómo me siento emocionalmente? Esto hace referencia a mi disposición psicológica ante mi vida cotidiana, es decir, mis estados de alegría, motivación, capacidad de comunicación y relacionarse de manera asertiva con quienes convivo.
- ¿Cómo me siento espiritualmente? y esta es la parte más confusa algunas veces, ya que se refiere a nuestro estado más profundo de satisfacción, balance y armonía que mantenemos con nosotras mismas.
- Estos tres cuestionamientos básicos nos darán un punto de partida para saber de manera más objetiva, cual es mi situación actual de manera más integral y desde allí podremos también plantearnos: ¿Qué puedo hacer desde mi situación actual para mejorar mi calidad de vida?
- Quiero recordar que la frase más repetida de: “hacer ejercicio”, no debe responder sólo a la primera pregunta: ¿Cómo me siento y que necesito desde el punto de vista de la salud física?; al contrario, para que nuestras decisiones realmente respondan a nuestras necesidades, gustos y carencias, debemos profundizar en la situación emocional, mental y espiritual, porque estos factores son los que determinan la elección adecuada de un tipo u otro de actividad física o programa de ejercitación en el cual recibamos lo necesario y esto se traduce en una retroalimentación positiva que garantizara no solamente decidir: “manana empiezo a caminar en el parque cercano a casa”, o bien, “El lunes me inscribo en el gimnasio”. Por el contrario, el permitirnos hacer un análisis “personal y profundo” aquí y ahora de mis circunstancias de vida, nos permitirá “mantenernos”, es decir, ser constantes en aquello que hayamos elegido.
- A continuación, les ofrezco una guía sencilla que puede servir antes de hacer una elección una vez que hemos realizado nuestro “análisis personal y profundo”.
- ¿En qué horario me motiva más la ejercitación?
- ¿Prefiero actividades en grupo o más bien personalizadas?
- ¿Disfruto de la música, el baile, las prácticas coreográficas?
- ¿Me interesa el entrenamiento más intenso y los desafíos o las actividades más ligeras?
- ¿Prefiero la actividad al aire libre, en espacios abiertos o más bien cerrados y controlados?
- ¿Me siento cómoda en actividades mixtas o más bien separadas por género?
- ¿Disfruto las actividades físicas de carácter lúdico y equipo o más dirigidas por un instructor?
- ¿Me atraen las clases o prácticas que combinen la ejercitación cuerpo-mente donde la introspección, la contemplación y la relajación estén incluidas?
Este breve cuestionario te dará herramientas para tener más claridad en la elección y eso garantizará tu permanencia y disfrutarás de los beneficios no solo físicos, de salud o estéticos que la actividad física y el ejercicio te pueden brindar. Recuerda que cuando esta forma parte de tu rutina diaria, cuando es parte de tu vida realmente, deja de ser una obligación tediosa, o un “deber” para convertirse en un “querer”. El placer y los múltiples beneficios emanados de iniciarte en una vida activa se reflejarán en todos los aspectos de tu vida y los iremos analizando en las siguientes notas.
Así que, ¡A ponerse en MOVIMIENTO CHICAS!