Lupita Díaz comprometida con las familias víctimas de feminicidio

La otra cara de la violencia, están los niños en condición de orfandad y la condición de sus familiares para enfrentar el proceso de sanación emocional

@Karla Ayala

Recientemente, por medio de una solicitud que le llegó a la oficina de la diputada, Lupita Díaz Chagolla, la legisladora pudo entregar un calentador solar a una familia víctima de feminicidio, donde hay una menor en condición de orfandad a cargo de sus abuelos, una persona con discapacitada en sus facultades mentales; dos adolescentes y un adulto mayor.

Gracias a la sensibilidad de la congresista perredista, se comprometió a pagar el material para la instalación del calentador solar, así como de mandar una despensa mensual para la familia y aportar para las inscripciones de uno de los hijos para que no deje sus estudios; pagar cursos de verano de las dos niñas en casa, de clases de pintura y danza, de las cuales podrán encontrar una motivación y un apoyo emocional para aminorar los estragos del feminicidio.

La otra cara del feminicidio

Más de 5 mil niños en México están en condición de orfandad por el incremento de los feminicidios en el país, según datos ofrecidos en el Foro Nacional sobre Feminicidios: Visiones y Soluciones, realizado en octubre del año pasado, por el Senado de la República.

El feminicidio es una realidad latente, el 86 por ciento del país está en alerta por la violencia de género, una realidad que no se resolverse y sí se normaliza entre la sociedad, de la cual se desprenden otras problemáticas, tal es el caso de los niños que se quedan sin su madre y padre, ya que el 45 por ciento de los feminicidios fueron cometidos por la pareja sentimental.

En Michoacán, según datos de la Secretaría de la Mujer, hay casi 200 niños que están en condición de orfandad por el feminicidio, por lo cual, existe un programa piloto que pretende apoyar a los familiares o tutores que se encargan de ellos, con 35 mil pesos, en un pago único.

Al respecto, la diputada local, Guadalupe Díaz Chagolla opinó que, si bien el apoyo es bueno, el educar y orientar a un niño que vivió en violencia familiar; que tiene duelos pendientes; choque de emociones por el asesinato, donde es evidente que debe haber un tratamiento psicológico; un seguimiento en su desarrollo social; así como ayuda en la parte escolar y nutricional, la realidad es poco sirve un pago único.