Angelo un perro salvavidas

El pitbull que sonreía y movía la cola como un hierro

@Karla Ayala

Mi Angelo fue el perro más fiel, aunque tenía la cara de muy mal encarado, era el perro más noble que he conocido. Su característica principal fue sonreír y mover la cola más fuerte que un hierro.

Angelo era un pitbull, me lo regaló mi amiga Alejandra porque su vecina lo rescató de la calle, estaba en un terreno baldío sin agua y nada de comer. Lo llevaron a la veterinaria y lo mantuvieron ahí hasta que Ale se lo llevó a su casa.

Angelo tenía la mirada tierna, sin embargo, su tamaño imponía demasiado, aunque se encontraba flaco como un esqueleto, que cabía perfectamente entre las rejas de la puerta, me intimidó desde que lo vi llegar al grado de no querer bajar porque sentía que me mordía.

Le puse Angelo por el miedo, pero también porque fue un ángel caído del cielo que me rescató de la soledad que estaba pasando en ese momento. Poco a poco fuimos conviviendo y pasaron dos semanas para que fuéramos inseparables.

Después de que nació mi bebé, Angelo supo que ya no estaba sola. Como buen ángel aguantó cuatro años conmigo y partió de regreso a casa, al cielo de los perros por un cáncer que tenía en la piel y es que le afectó la sarna que tuvo por mucho tiempo, mientras estuvo en la calle, le invadió parte de sus órganos por lo que sus últimos momentos fue de mucho dolor para ese perrito rescatado.

Hasta el cielo te mando mis besos, siempre estás conmigo, tus sonrisas me las guardo.

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