Día Mundial de la Asistencia Humanitaria
Las crisis son fenómenos en los que podemos desarrollar y demostrar nuestra capacidad de empatía y resiliencia, aunque realmente nunca se está preparado del todo para ello
@Fernanda Soto
El 19 de agosto se celebra el Día Mundial de Asistencia Humanitaria, gracias un decreto oficial establecido por la ONU y cuyo principal objetivo es rendir homenaje a todos los trabajadores humanitarios, que continúan realizando una importante labor en pro del bienestar de millones de personas en todo el mundo, así como también, a todos aquellos que han sido asesinados cumpliendo sus funciones.
¿Por qué se celebra el Día Mundial de Asistencia Humanitaria?
El origen de esta celebración se remonta al año 2008 cuando la Organización de las Naciones Unidas decretó este día en conmemoración del atentado terrorista perpetrado en Bagdad, Iraq el 19 de agosto del año 2003 contra la sede de esta emblemática organización y que causó la muerte de 22 personas, incluyendo a uno de sus miembros, el diplomático para la ONU, Sergio Vieira de Mello.
Este importante activista de nacionalidad brasileña, desempeñó sus funciones durante más de 34 años en labores humanitarias.
Gracias a ello y como un homenaje póstumo, su país le otorgó una medalla por haber dejado un gran legado en defensa de la paz y de las personas más vulnerables y desasistidas de todo el planeta.
Cuando surgen las crisis, las vidas de las personas cambian en apenas un instante. Las muertes, lesiones, desplazamientos y destrucción de la infraestructura y las instituciones afectan a comunidades enteras.
Acción humanitaria en ONU MUJERES
Las crisis afectan a las mujeres, las niñas, los niños y los hombres de todas las edades de manera distinta. Por lo tanto, sus necesidades e intereses son también distintos, lo mismo que sus recursos, capacidades y estrategias de afrontamiento. Las mujeres son a menudo las primeras en responder a una crisis, y desempeñan un papel central en la supervivencia y la resistencia de las familias y las comunidades.
Las mujeres y las niñas no son víctimas indefensas. Los esfuerzos humanitarios deben reconocer el hecho de que las mujeres y las niñas, al igual que los hombres y los niños, tienen mucho que contribuir en la preparación y respuesta a las crisis. Se debe incluir a las mujeres en la toma de decisiones acerca de las formas de asistencia y protección que necesiten. La acción humanitaria también puede presentar oportunidades para que surjan roles y relaciones de género nuevos y más progresistas.