Las aventuras de una mamá desastrosa
Lo maravilloso de la maternidad y el lado obscuro de las madres
@Karla Ayala
Esta es una sección nueva queridas amigas, les comparto un poco de mis experiencias y peripecias que he vivido a lo largo de cinco años de esta increíble labor de ser madre. A veces siento que todo lo que he hecho en este tiempo es imposible de que yo lo pudiera lograr. ¡Lo pude lograr!
Les cuento que mi primer reto como madre fue aceptar mis instintos maternos. Si, así como lo lees, esos que tenemos las mamás, a lo mejor es ese famoso sexto sentido que tanto se habla y que me sacaba de onda de mi madre, jajaja, sí, ese don de adivina, de las cosas que no quería que supiera 😉
Pero sí mis amigas, no podía creer que me sentí embarazada al tercer día de hacer a mi niño, de vivir esa conexión digo yo mágica, pero más real que nada; así como un pensamiento vino a mi mente y supe que en mi ser estaba mi niño hermoso.
Eso de saber casi al instante que estaba embarazada tuvo sus beneficios y sus complicaciones, les puedo decir que fui muy consciente del paso que di y con mucho amor elegí ser madre.
Las complicaciones se hicieron presentes cuando llegó la desesperación de saber sí era cierto esto que sentía porque tuvo que pasar tres semanas para que se implantara el embrión en mi útero y entonces sí poder decir que venía un bebé en camino.
Paciencia me recomendó el doctor, cosa que carecía hasta este reto mío de la maternidad. El día que la prueba de sangre salió positiva y que en el ultrasonido pude ver ese chicharo, mi Santi, fue entonces que comprendí del poder de ser madre; del poder de la intuición y del verdadero amor.