Marcha 8M en Morelia, saldo corazones desahogados
Para no quedarse calladas, mujeres salieron a marchar en el marco del Día Internacional de la Mujer y expresaron sentimientos por las injusticias que viven las michoacanas
@Karla Ayala
A diferencia de un año, la marcha feminista del Día Internacional de la Mujer en el Centro Histórico de Morelia fue representativa, hubo vidrios rotos y paredes rayadas por la violencia contra las mujeres que persiste en la sociedad michoacana, pero, la represión nunca llegó.
Feministas, familiares de víctimas de feminicidio, madres con hijos desaparecidos, víctimas de abuso sexual, así como sociedad civil harta de la violencia contra las mujeres gritaron, marcharon y tuvieron paciencia por los destrozos que provocaron los contingentes a su paso.
Con un Palacio de Gobierno sin vallas, el Centro Histórico custodiado, las mujeres gritaron para demandar a las autoridades más leyes severas para los feminicidas, abusadores, jefes corruptos, esposos crueles, vecinos agresores y familiares que maltratan de las mujeres; mejor actuación de la justicia y con instituciones empáticas del dolor de las víctimas.
En el Templo de las Monjas, un grupo de personas de Provida, como siempre pasa en las marchas feministas, cara a cara se topan. Unos cuidando el templo; las otras irreverentes porque así han tenido que actuar, después de años de represión y sometimiento, cada grupo convencidos de sus ideales.
Están también las que no se sienten representadas, las mujeres que piden respeto a la ciudad donde viven; las que saben que se destruyen propiedades de familias morelianas que trabajan para tener una vida más digna y por su gente; las que no quieren ver paredes pintadas; las que se asustan de la turba que se congrega cada año por la lucha de las mujeres.